Ni mucho, ni poco... NADA.

Empiezas a dar pasos poco a poco, cuando crees que has llegado al final que ya has ganado esta batalla te das cuenta que solo acaba de empezar y que no te puedes dar por vencida que hay que luchar desde el principio hasta el final.

Cuando te das cuenta que no puedes mas, sacas ganas de donde no las hay.

Vives acostumbrada a llorar encerrada y a sonreír en la calle, que detrás de esa sonrisa se esconden miles de sentimientos.

Muchos son los creen que te conocen y pocos son los que saben cada uno de tus sentimientos.

Pocos son los que te ayudan a levantarte y muchos son los que te ayudan a hundirte.

Cuando crees que esta todo bien, llegan por atrás y te la vuelven a hacer.

Querida Gin, Tonic:

Es el momento de escribirte lo que nunca fui capaz de decirte, aunque sea tarde. Escribir lo que ha sucedido en una carta que no te voy a mandar, que no vas a recibir nunca. Que como tú me enseñaste, en cuanto acabe de escribirla la quemaré, mis sentimientos se pondrán a arder, y así el dolor, cómo era? cómo decías tú? Ah ya, así el dolor no se te queda tan dentro. 
Esta vez solo quiero ser claro. Sería un imbécil si no gritara que me he equivocado, contigo, que la he cagado pero bien, desde el principio, que he intentado avanzar sin apartar antes las cosas que lo impedían, agarrado al pasado, mirando para atrás, queriendo olvidar pero sin parar de recordar, que locura Gin, empeñado en quedarme ahí, en medio de un lado y del otro, sin perdonar, sin perdonarme, sin avanzar. ¿Dónde está el secreto del futuro, Gin? Puede que esté en fijarse bien, en avanzar, mirar más cerca, más, tan cerca que lo borroso se vuelve nítido, se vuelve claro... Claro! hay cosas que pasaron antes, mucho antes. No quiero esperar milagros, sólo que las cosas pasen, o no? si, no, si. no, si, no, y ahora lo tendría claro, pero ahora ya no depende de mi, sino de ti.
Te quiero.

Hay momentos inevitables en los cuales no puedes evitar echar la vista atrás y entonces es cuando te das cuenta de todas esas personas que se han quedado en mitad de tu camino, esas personas que no han querido continuar a tu lado y que un día te dijeron; "nunca nos alejaremos."
Entonces es cuando se te viene el mundo encima y empiezas a recordar cada momento a su lado, cada sonrisa que te han sacando y cada sonrisa que tu le has sacado a ellas/os, la impotencia y la rabia te invaden el cuerpo y nadie ni nada te impide romper a llorar.
Te dan ganas de pedirle a cada uno/a de ellos /as una explicación, que por que de la noche a la mañana todo se fue, que por que prometen si no son capaces de cumplir, que por que me han sacado tantas sonrisas cuando no lo sentían.

Me alegra saber que por lo menos hay una amistad.
Que cuando me pide consejo por alguna razón me hace feliz, yo siempre he querido lo mejor para el, a mi lado o fuera de mi lado pero siempre me ha gustado verle con una sonrisa.
He aprendido que guardarle rencor y tenerle odio a la gente no sirve de nada.
Así que aunque no me haya llevado mucho de el si que sé que muy poca gente le conoce de verdad .
En su día yo le dije que aunque nos separáramos a mi siempre me iba a tener para escucharle en todo y aquí estoy a su lado escuchándole tenga tiempo o no.
Todos dicen de conocerle y pocos son los que le conocen de verdad, no se muestra tal y como es, me encanta verle con una sonrisa en su rostro sea el motivo por el que sea.
No me gusta recordar el pasado, tan solo me quiero quedar con el presente.

Gracias a todas esas personas que me fallaron una vez en la vida, sí miles de gracias.
Gracias a ellas ahora sé que no termino de conocer nunca a nadie, que aunque te digan "siempre juntas/os" las palabras se las lleva el viento, que no te puedes fiar ni de tu propia sombra, que tienes que aprender a seguir tu propio camino y no dejar llevarte por nadie, que no debo ilusionarme tan rápido, que cuando me digan "buenos días princesa" no debo sonreir como una tonta; total la mañana siguiente no se acordaran de mi.
He aprendido que los amigos de verdad son los que te defienden a las espaldas y te critican a la cara.
Gracias a cada uno/a de mi vida que pasaron por ella y me la jugaron, tranquilos; de los errores se aprende.

Cuando crees que todo vuelve a la realidad, que toda la pesadilla a desaparecido te vuelven a clavar otra por la espalda, no te acabas de levantar de una y te vuelves a caer.

Es algo que nos ocurre demasiado o por lo menos ami hay rachas en las que no terminas de levantarte y te ves otra vez en el suelo, pero esas tienen que ser las que te animen a levantarte con mas fuerza, con mas ánimo; sal y comete el mundo de un bocado no esperes que el mundo de coma a ti. 

Hay mucha gente que dice: "El que siembra recoge" "Si tu das la vida te dará." Todo no es así, aveces llega el punto en el que estas apunto de tirar la toalla, que estas cansado de dar y no recibir, de dar todo lo que puedes y no recoger nada de provecho, de ver que gente que se esfuerza menos que tú, recibe más.

Con todo esto he aprendido que la suerte en la vida se necesita, aunque sea una poca y yo todavía no es que haya tenido mucha, pero sé que con esfuerzo, constancia y una sonrisa en mi rostro algún día podré decir: Sí, por fin.

Así que desde aquí os animo que luchéis por vuestros sueños y que paso a paso se llega muy lejos.