No digas que estás dispuesta a luchar cuando sabes que lo único que quieres es marcharte de aquel lugar, tirar la toalla y no volver a ver a ninguna de aquellas personas.
No digas que estás dispuesta a perdonar cando es el rencor el sentimiento que te invade.
No digas que eres capaz de hacer cualquier cosa si conoces que "cualquier cosa" tiene un límite.
No estés en compañía cuando lo que deseas es estar sola.
No quieras decir lo que otros pretenden, empieza a querer lo que dices por ti.
No escojas un ropa especial para esconder tus miedos, escoge la ropa con la que te identifiques.
No maquilles tus lágrimas con rímel de Channel, déjalas caer y que ese rímel se convierta en lo que es, una fachada. No pretendas medir 1.80 sé feliz con tu metro sesenta...
No pretendas APARENTAR porque cuando lo dejes de hacer, serás tú misma y conseguirás que alguien te consiga apreciar a Tí. Por Tí. Y gracias a TÍ.
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