Dos mundos opuestos dispuestos a encontrarse. Un amor imposible que desafiará al destino. ¿Has estado alguna vez a punto de tocar el cielo?

Me acuerdo cuando era pequeñita, que mi mayor preocupación era salirme de las líneas al colorear, cuando mi mayor miedo era caerme y lo que esperaba con todas las ganas que una niña puede tener es que me dejaran salir con mis amigas a jugar.

Todo eso ahora ha cambiado, ahora mi mayor preocupación es no encontrar a alguien para olvidarlo y que me diga todo lo que siente de verdad y no me haga promesas falsas, mi mayor miedo se ha convertido en caer otra vez sobre él y que no lo pueda olvidar y lo que ahora espero con más ganas es olvidarlo y encontrar a alguien que me sepa valorar tal y como soy, que no me quiera hacer cambiar y eso de salir con las amigas ya se a quedado aburrido, porque eso es ya algo habitual.

Como os podéis dar cuenta mi mundo ahora gira entorno a él, a olvidarlo, olvidarlo y olvidarlo y sé que muy pronto lo conseguiré, porque me ha hecho mucho daño.